Seguramente usted querido y único lector que aún espera pacientemente que publique algo cada año, seguramente usted ya es Lord of Office y pues ha de saber que la gente con la que trabaja es tan variada como la misma que hay en el metro Hidalgo a las 12 del día.
Y pues bueno en un país donde se trabaja mucho y se gana poco, pasas todo el día conviviendo, soportando o siendo soportado por un grupo de personas ajenas a tu familia, amigos, compañeros de escuela, vecinos y demás.
Una subraza de personajes que se alimentan gracias a la misma fuente que tu, reciben sus vales de despensa en la misma ventanilla, algunos se estacionan junto a tu vehículo incluso a veces comen y beben juntos, pero aún pasando más tiempo con ellos que con tu propia familia, nunca es suficiente.
Ellos siempre quieren piensan que merecen más y que tu mereces menos. Obvio ser el jefe tiene su dosis de odio gratuito.
Y bajo la ley de que no existe el vecino perfecto y haz aprendido a dormir con la ñora del depa de arriba que camina en tacones y arrastra sus muebles a las dos de la mañana o con los gemidos del vecino que se tira a su novia cada martes, bajo esa regla, aprende a vivir con las especies diferentes de la fauna nociva laboral.
Y sobretodo cuando por circunstancias del destino te tocó ser el animal que administra ese pequeño zoo.
Obvio que los siguientes tips en realidad son sacados de un par de libros, dos revistas chafas y de un blog muy bueno de recursos humanos, lo que no los hace inmunes al error pero al menos fueron testeados en animales vivos.
Por obvio que parezca, es cierto que nadie, como compañero de trabajo, ni como nada en la vida, es perfecto. Hay que tenerlo claro, dar el paso de asumir nuestros errores, no tener inconveniente en reconocerlo y pedir disculpas a las personas que hayamos podido molestar o importunar. Esto es muy fácil decirlo y más complicado hacerlo en realidad.
Y pues bueno es obvio también, que es más fácil joder a todos que ser buen compañero, aunque la mayoría de las personas sólo joden sin saber que lo hacen, así son, así los hicieron o simplemente nunca han sabido que pueden hacer las cosas de otro modo.
He aquí la lista de personajes coleccionables de la fauna nociva laboral, identifíquese querido amigo de forma conciente y admisible y por dios, haga algo al respecto para dejar de ser así.
El “Antiprotocolario” o el Flanagan
Gente que no es muy “gente” que digamos, no tienen modales, talvez sean hermanos de Mowgli o fueron abandonados por su madre de niños.
No saben de protocolo. No saben de modales, No saben comportarse propiamente, sin llegar a un experto en Carreñología, simplemente no saben reglas básicas de convivencia.
No dicen: Buenos días, No dejan pasar a una mujer antes en el elevador, no se despiden al irse, no agradecen nunca. Aún cuando como jefe les ayudas con algo, ellos dan por hecho que tu debes hacerlo por sólo ser su jefe. Creen que es tu obligación ser buen pedo con ellos y ellos no deben darte ni las gracias. Creen que la empresa les debe mucho por su tiempo y no que ellos pueden ofrecer algo a su trabajo, no entienden que trabajan para alguien y no asimilan todo lo bueno que pueden lograr.
Del mismo modo al pedirle ayuda a este tipo de fauna, te responderán con pretextos, indiferencia, malos modos, etc. Ya que creen que no tienen porqué hacer más de lo que su trabajo les pide que hagan “según ellos para eso estás tu que eres el jefe” En general son el tipo de personas de las que todos huyen, los que comen solos o con el mismo compañero diario, los que acaban siendo despedidos de una forma de cierto modo injusta, basada solamente en la percepción de los compañeros a su alrededor y no en su capacidad laboral.
La solución:
Hablar con ellos de forma directa, plantarles el problema y hacerles ver que su actitud no es saludable para nadie incluido ellos mismos. Aunque es muy difícil que ellos acepten sus errores, son un caso difícil del que desgraciadamente es más fácil salir, desechando a la persona por ser un Antiprotocolario.
El “Monologuista” o el Adal Ramones
Esta especie es la que por más que parezca que te escucha, siempre acaba haciendo lo que le da la gana, en un par de ocasiones hacerlo le ha salido bien, así que piensan que son mejores que todo mundo y que sus ideas y opiniones son las únicas en la sala, cerrando los oídos a críticas y opiniones sobre ellos de quien sea que provengan.
Juntarte a hablar con ellos es difícil ya que nunca tendrán la culpa, siempre hacen demasiado trabajo, siempre hacen ellos todo, siempre es culpa de los demás, siempre ellos, ellos, ellos.
Son un Yo multiplicado dentro del mismo ad infinitum.
Su punto de vista es el único correcto, sin importar cuantos y quienes les digan que están mal.
Por lo que son personas que se quedan estancadas, no crecen y esto lejos de animarlos a cambiar los hace pensar que todo mundo está en su contra.
Lo que sea con tal de nunca aceptar que algo hacen mal y que sólo ellos pueden corregirlo.
La solución:
Personal de apoyo, no importa cuantas veces hables con ellos, nunca aceptan los hechos y siempre hablan de ellos mismos, te culparán a ti si es necesario pero ellos nunca tienen la culpa de nada, son perfectos desde su perspectiva, necesitarás más de una platica y mucho más que tu sola opinión, invita a más involucrados y sin ser un jurado, que le exponga cada uno su área de oportunidad, total si no cambia, al menos ya hiciste lo posible por el, seguramente también te cansarás y terminarás deshaciéndote de él a menos que… ¿Quieren un monologueee?
El “Doblecara” o el ¡¡Que pase el desgraciao!!
Son aquellos que con cara de buen pedo se acercan en el momento adecuado y absorben todo lo que pueden de cualquier otro elemento, con bandera de soy tu cuate, soy de confianza, no te preocupes, se meten en todo y los demás se los permiten porque parecen buenos amigos.
Lo que no sabes es que como una esponja absorben toda la información que pueden con la finalidad de utilizarla en algún otro foro. Estos seres son totalmente incapaces de guardar un secreto y a veces hasta inconcientes de ello, todo lo que saben lo reparten y tienen la necesidad constante de saber más acerca de las personas, sacar conjeturas y encima hablar de ello como si sus ideas fueran la verdad, pasan del “yo me imagino que… al pues yo sé que…” cuando se refieren a algún otro compañero.
Es difícil de identificar a esta especie y lo malo es que muchas veces se identifica hasta que su veneno ha hecho ponzoña en el cuerpo de alguien más.
Este tipo de personajes pueden ser muy útiles cuando quieres crear una imagen o hacer que un mensaje de difumine sin ser tu quien lo dé directamente.
Aunque son personajes peligrosos ya que no sólo escuchan todo si no lo dispersan y muchas veces crean sus propias versiones con hechos que se supone que nadie más conoce más que tu.
La solución:
Si no puedes usar estos elementos a tu favor, mas te vale que investigues sobre ellos los confrontes y les digas que sabes quienes son, antes de que ellos inventen quien eres tu y te hagan el favor de destruir tu imagen.
El “Mafioso” o el Paquita la del Barrio
Esta es otra especie nociva en el laburo, aquel que nunca olvida ni perdona nada. Acumulan todo lo que según ellos les has hecho y esperan un día te arrodilles y clames su piedad y perdón por cada uno de esos supuestos pecados tuyos contra ellos.
Viven en el reproche y conviven con el castigo. Como el mundo es injusto con ellos; ellos mismos se la cobran después siendo aprovechados contigo que eres su jefe.
Son el clásico que si se quedó tarde un día, otro día se inventarán algo para llegar tarde o hasta faltar. Nunca ganan lo suficiente, y tu nunca ganas lo justo, siempre ganarás de más ante su forma de ver el mundo. Ya que ellos harían mejor tu trabajo según su percepción.
Eso si, son buenos para pedir favores, permisos, vacaciones, etc.
Pero muy malos para ofrecer lo que sea que debieran hacer.
Son como aboneros, cobran todo lo que creen que se les debe y lo hacen de muchos modos, de golpe, poco a poco o en abonos chiquitos.
Pero siempre lograrán que tu acabes pagándoles a ellos de algún modo.
La solución:
Atorméntalos con canciones de Paquita la del Barrio hasta que un día por obra y gracia de la Rosa de Guadalupe un viento les mueva el pelo y cambien su nociva actitud. Eso o lleva un registro de cada falta y conviértete en un abonero antes que ellos vengan a cobrarte, haz que cuando te pidan algo ya te deban algo.
El “Delegueitor” o el hábil y conspicuo patronazo
Este carácter es un experto en delegar tareas propias a los demás, necesitan de un mando medio pero a veces sin tenerlo se valen en su antigüedad o su propia labia para endosarle a otros elementos su propio trabajo. Esta especie hacen lo que sea por hacer menos, aunque su trabajo nunca faltará ya que siempre encontrarán alguien capaz y muchas veces mejor que ellos para que les haga el trabajo.
Se adornan con logros ajenos, siempre tienen tiempo libre, salen a comer más tiempo que el permitido, se van más temprano que los demás, pero nunca puedes reclamarles ya que su trabajo siempre está cumplido, por otros. Pero cumplido. Creen que no tienes armas para atraparlos.
La solución:
Es inminente que prevengas a tu equipo de estos seres para que cada quien sepa que debe saber decir que no de una forma correcta o se volverá en el mandadero de este ser.
Aunque directamente como jefe no te ataque este ser, si es creador de conflictos ya que cuando cae una presa y se convierte en su esclavo, un día se dará cuenta del abuso, seguramente será demasiado tarde y frustrará mucho a su trabajo, muy probablemente este ser destruido y frustrado será el mejor de tus elementos ya que el Delegueitor siempre se vale de los mejores para usar sus cualidades a favor. Haz que esté en evidencia de forma inteligente y que el equipo sepa de qué pata cojea sin exhibirlo.
El “Burócrata Perdido” o el nomás un cigarrito
El clásico que siempre tiene otra cosa que hacer, siempre está tapado de chamba, aún cuando tu que la administras sabes que no es verdad, siempre se inventa compromisos para huir, siempre está trabajando como un perro, pero eso sí. Es el que siempre desayuna en horas de trabajo dos horas por la mañana, sale a fumar 5 o 8 veces al día, va a la “tienda” 3 o 4 veces, al baño el triple de las veces que sea humanamente necesario, pasa el mayor tiempo leyendo mamadas como esta y otras más en redes sociales. Etc.
Estos seres habitan o más bien invaden otros departamentos, se la pasan donde sea menos en su lugar de trabajo, son nómadas, viajan donde haya alimento o cualquier otra cosa que crean que necesitan y no tengan en su lugar, como un kleenex o una engrapadora.
Técnicamente es el que aplica el “momentito” todo el día, todos los días.
Si no trabajas en atención a clientes de una aseguradora no te conviene tener este tipo de plaga.
La solución.
Fíjale metas claras y sé más estricto con las entregas, talvez nunca lo corregirás pero al menos sus pulmones, sus niveles de azúcar y los otros a los que les quita el tiempo te lo agradecerán.
El “Amargado” o el niño sin amor
Este es uno de los peores ya que no sólo es mal intencionado en el trabajo si no es su forma de ser y vivir diaria.
Mal hablado, a veces hasta mal vestido, comentarios punzantes, hirientes, el terror de los compañeros.
En su niñez seguramente era el niño ese que no te acuerdas de su nombre, se sentó en el mismo lugar toda la primaria y fue a a uno de tus cumpleaños, pero nadie lo recuerda.
Este ente tiene la facultad de permear a los demás de su mal pedismo y creyéndose Andy Kaufman cree que es gracioso pero en su casa se hace bolita en la regadera y llora como un bebé por su soledad.
Se enorgullece de manejar el humor negro pero lo único que tiene negro es el seso ya que por lo regular una persona llena de tanto malpedismo no tiene nada que ofrecer y por lo tanto es simplemente useles, manda al diablo a las mujeres, se mancha con algunos hombres y con los que no puede habla a sus espaldas, este es el peor de la fauna oficinista, ¿La solución? ¿Neta la quieres? Ok.
Síguelo a su casa y prendele fuego a su departamento con el dentro a las 3 de la mañana.
Espero les haya servido e ilustrado esta pequeña parte del manual, esperen más mis queridos Satamiguitos, mientras tanto tómen su chocolatote!!!!!!!!!!!!!!
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